miércoles, 19 de noviembre de 2008

Descubriendo cosas ricas

Recientemente he descubierto una cosa muy muy rica llamada boniato.

 Lo había probado asado, pero no me decía gran cosa.

 El otro día, sin embargo, lo corté muy finito y lo freí, como si estuviera haciendo patatas fritas, y estaba buenísimo.

 Así que he buscado recetas con boniatos, para probarlo como postre, que en mi opinión es lo que más le pega, porque es así como dulce.

 Además metiendolos en un jarrón con mucha agua casi sumergidos, le salen raíces y unas hojas muy bonitas. 

Mi madre me ha contado que antes de que yo naciera, ella plantó muchísimos y crecieron todos e invadieron la casa. 

Así que plantad pocos o os encontrareís con una versión catalana de la Audrey II de la Tienda de los horrores.

Aquí os dejo una receta. 

Yo la haré el Lunes para la Noche de pelis semanal, y os diré que tal me ha ido. Y por si os quereís adelantar...


Pastisset de moniato (Pastel de boniato)

 

  • Ingredientes para la masa:
  • 1 vaso de azúcar.
  • 1 vaso de aceite.
  • 150 gr. de mantequilla.
  • 1 vaso de anís fuerte.
  • 2 huevos.
  • 720 gr. de harina.
  • Ingredientes para el relleno:
  • 1/2 k. de boniatos ya preparados, pelados y triturados.
  • 1/2 k. de azúcar.
  • 1 limón,
  • Canela en polvo.

Método: Preparación del relleno: Asar los boniatos en el horno, aunque algunos los cuecen. Pelarlos y hacerlos una masa uniforme como si fuera un puré espeso. El azúcar ha de estar en la misma proporción que el boniato, por tanto si hubiera más de 1/2 k. de este habría que poner más azúcar hasta igualar pesos. Lavar bien el limón para quitarle toda la suciedad que pudiera tener, y una vez limpio y seco, rallar la corteza de forma que no entre más que la parte superficial.

En una cazuela al fuego, preferentemente de barro, se ponen el boniato, el azúcar, la ralladura de limón y un poco de canela en polvo.

Esta masa se va cociendo a fuego lento hasta conseguir que boniato y azúcar formen un mismo cuerpo, esto se consigue removiendo continuamente la masa para evitar que se pegue o se queme. Aproximadamente en una media hora tendremos la masa en condiciones.

Se retira del fuego y se deja reposar.

Es muy conveniente que este relleno se haya hecho el día anterior. La masa así reposada está mucho mejor no se porque.

Preparación de la masa: En un recipiente amplio puesto al fuego, echamos el aceite, la mantequilla y el azúcar hasta que se haya fundido todo formando un solo elemento. Conseguido esto lo retiramos del fuego y añadimos el anís y poco a poco la harina trabajándola hasta obtener una masa fina que se pueda moldear. Añadimos entonces un huevo entero(clara y yema) y la yema del otro huevo. Se baten muy bien y esta mezcla la añadimos a la masa anterior y seguimos trabajándola muy bien.

Cuando ya tengamos perfectamente la masa, tomaremos de esta porciones del tamaño de una nuez más o menos y con el rodillo las aplanaremos formando tortitas de unos 12 cms. de diámetro. Cuanto más finas sean estas tortitas, más se notará el relleno y más buenos estarán los pasteles.

Una vez colocado el relleno un poco al gusto de cada uno, normalmente una cucharada, a mi me gusta un poco más abundante, se doblan por su diámetro, se presionan los bordes y pintamos con la clara batida la superficie de los pasteles y los espolvoreamos con un poco de azúcar y canela en polvo.

Hecho esto los metemos al horno que previamente habremos encendido a unos 150º para tenerlo a punto de caliente.

Finalmente se meten al horno durante unos 20 minutos para que se vayan terminando de hacer y se tueste el azúcar y canela conque los hemos espolvoreado.

Se dejan enfriar y a comérselos en cuanto estén en condiciones. 

1 comentario:

Superbaturra dijo...

estamos todas cocineras, por lo que veo ;P
Fiestaaaaaaaaaahhhhhh!